El sábado 22 de marzo, a las 07:00 a.m., un grupo de hermanos de la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile – Arica Norte se congregaron en el templo matriz para dar inicio a una jornada de trabajo espiritual, reuniéndose en un periodo de oración, rogando la dirección y protección del Señor antes de emprender el viaje con destino a Ilo, Perú.
Tras cruzar el control fronterizo en la ciudad de Tacna, los hermanos continuaron rumbo a Ilo, acompañados de cánticos y clamores en los vehículos, buscando la presencia de Dios y pidiendo su confirmación para el trabajo espiritual que se disponían a realizar. Ya desde esos momentos, el respaldo del Señor se hacía sentir.
Cerca del mediodía, (10:00 a.m. hora peruana), la delegación llegó a la Clase de Ilo, perteneciente a la Iglesia Metodista Pentecostal de Tacna – Perú, siendo recibidos con cariño por los hermanos de ese lugar. Al llegar, se elevó una oración de gratitud por el cuidado que el Señor brindó durante el viaje.
Posteriormente, los hermanos se trasladaron a otro sector de la ciudad, donde, alrededor de las 13:00 horas (11:00 a.m. hora peruana), se dio inicio al primer punto de predicación. Durante dos horas se predicó el evangelio de salvación, se entonaron himnos de llamamiento y se repartieron tratados a las personas que pasaban. Muchos saludaban con amabilidad, algunos sorprendidos, pero todos con respeto ante el mensaje que se anunciaba.
Este punto evangelístico contó con el valioso apoyo de hermanos de la iglesia de Tacna y de la misma localidad de Ilo, entre ellos el pastor William Aquino, pastor gobernante de la Iglesia Metodista Pentecostal de Tacna. Al concluir esta labor, se entregó este primer trabajo espiritual al Señor en la Clase de Ilo, agradeciendo y entregando toda Gloria a Dios.
Porque “ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.”
Luego de esta labor espiritual, los hermanos compartieron un almuerzo en comunión, fortaleciendo la confraternidad entre la delegación de Arica y los hermanos peruanos.
Ya en la tarde, se organizó un segundo punto de predicación en otro sector de Ilo. Alrededor de las 17:00 horas (15:00 hora peruana), se reinició la labor evangelística. Al comenzar, una vecina del lugar, visiblemente conmovida, se acercó para agradecer el mensaje y ofreció un gesto de cariño a los presentes. Manifestaba una gran necesidad espiritual, por lo que se solicitó a nuestro pastor Isaac Menares que intercediera en oración por ella, invocando al Señor.
Continuando la predicación, se siguieron distribuyendo tratados y se extendió la invitación a los cultos en la clase de Ilo. Entre los oyentes, algunas jóvenes se comprometieron a asistir al servicio, y más tarde efectivamente participaron en él, para la Gloria del Señor.
A eso de las 19:00 horas (17:00 hora peruana), se llegó nuevamente a la Clase para entregar esta segunda parte del trabajo. Allí, en un ambiente de gozo, se elevaron alabanzas al Señor en unidad fraternal.
A las 20:00 horas (18:00 hora peruana) dio inicio el Servicio Especial, entonando el himno 382 “Gracias te doy Señor”, dando paso a un hermoso tiempo de adoración. El pastor William Aquino, Presidente de la IMP del Perú, entregó palabras de bienvenida a la delegación, agradeciendo a Dios por la bendición de esta visita.
Luego, se concedió oportunidad a nuestro pastor Isaac Menares, Secretario de la Superintendencia de la IMP del Perú, quien reflexionó sobre los humildes comienzos de la obra del Señor: “No se empieza con grandes templos, sino con una o dos almas, y en esos inicios está Dios.” Posteriormente, fue encargado de exhortar la Palabra del Señor, basada en el Salmo 103:1-5:
“Bendice, alma mía, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre…”
El mensaje instó a no olvidar ninguno de los beneficios de Dios: su perdón, sanidad, restauración y misericordia. La presencia del Señor se manifestó poderosamente, en cada uno de los presentes.
Posteriormente, se concedieron oportunidades de gratitud a nuestra pastora Jenny Contreras Herrera, quien expresó su alegría por apoyar los inicios de la clase de Ilo; también al hermano encargado de esa localidad y su esposa, quienes testificaron cómo, a pesar de una fuerte lluvia que dañó el techo del templo semanas atrás, Dios proveyó para restaurarlo y poder recibir esta visita.
Asimismo, se otorgó una oportunidad a un hermano proveniente de la ciudad de Moquegua, quien alabó al Señor por permitirle asistir y compartió su anhelo de que también allí se inicie la obra del evangelio, confirmando el avance del Reino de Dios en tierras peruanas.
El servicio contó con la participación de hermanos de Arica, Ilo, Tacna y Moquegua, culminando con el himno 296 “Por ti, oh Cristo”, cuyas letras rogaban por la bendición del Espíritu Santo sobre la iglesia.
“Yo te ruego que guardes a tu Iglesia… que la llenes de tu Espíritu Santo…”
El culto concluyó con la bendición final, dejando en cada corazón un sentimiento de gozo y gratitud.
Finalmente, los hermanos de Ilo ofrecieron un agasajo de despedida, como una acción de amor cristiano. Así se dio por finalizada esta jornada de trabajo espiritual, retornando la delegación en la madrugada a sus hogares, agradecidos por las misericordias del Señor.
“Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos. Lucas 17:10”.
Todo es, solamente para la Honra y Gloria del Señor Jesucristo.